1. Todo empieza con el nombre del puzzle
En la mayoría de los casos, en la historia de Jour Férié, el nombre del rompecabezas surge incluso antes que la idea de la ilustración: «¡Se me ha ocurrido un título!Comer al aire libre. » Y con ese nombre, todo un universo se dibuja en nuestras mentes. Cada uno lo asocia con recuerdos felices y juntos evocamos los elementos que podrían constituir la escena: parrilladas, una ensalada de tomates, aceite de oliva, papas fritas, la sombra de un árbol... Cuando a todos nos gusta la idea, ¡Céline comienza su trabajo creativo!
2. El moodboard creativo
Imaginar una ilustración en nuestra cabeza es fácil. En cambio, elegir un punto de vista, una paleta de colores, los distintos niveles de lectura, los elementos clave que nos ayudarán a avanzar en la creación del puzzle, es harina de otro costal. Para ayudarnos a empezar, Céline nos presenta un moodboard de inspiraciones. De este modo, la idea se concreta y el futuro diseño del puzzle queda más claro. Y, sobre todo, siempre nos sorprende con sus sugerencias divertidas, poéticas y sensibles.
3. La paleta de colores
No es ningún secreto que nos encanta el color. Incluso en la elección de los colores de la caja. Tras imaginar el momento, Céline se inspira en todas partes para encontrar la combinación de colores adecuada. Luego saca sus lápices, témperas, cartas de colores, papeles y texturas para crear la paleta de colores específica que capta un nuevo estado de ánimo. Nuestro deseo es que haya una nueva armonía cromática con cada puzzle que creemos.
4. Bocetos preparatorios

En Jour Férié, cada dibujo de los rompecabezas se realiza con lápices de colores y gouache. Pero antes de pasar a la versión a tamaño real de 50 x 70 cm, Céline trabaja en varios bocetos pequeños. ¡Y son magníficos! Aunque nos gustan todos, elegimos el que tiene más potencial para convertirse en el rompecabezas perfecto. En esta etapa determinamos el nivel de dificultad: cuantos más elementos haya en el dibujo, más fácil será montar el puzzle. ¡La fabricación se va concretando!
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5. ¡Prepara tus lápices! 🖍️
Una vez elegido el boceto, Céline comienza con lo más difícil: colorear hasta el más mínimo detalle del futuro rompecabezas, en este caso La tarta de limón. Con la gouache y los lápices, es más complicado volver atrás. Eso es también lo que nos gusta del trabajo manual: las imperfecciones, los errores, lo inesperado. Los dibujos de Céline narran un momento de poesía sensible y no una realidad perfecta. ¡Eso es también el espíritu Jour Férié, una creación artística y artesanal!
6. Un escaneado y los últimos retoques 💻
¡El dibujo está listo! Lo llevamos al escáner profesional para digitalizar la obra en ultra alta calidad. Una vez escaneada la ilustración, se realizan los últimos retoques en la tableta. Tipografías muy finas, detalles minúsculos, y la ilustración está lista para ser impresa y recortada en pequeñas piezas. ¡Y ya está, ahora ya sabes cómo se fabrican nuestros puzzles!
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